Extraoficialmente se adujo que se tomó dicho acuerdo porque "sería un riesgo" en la presente veda electoral de tres días.
Para la firma del "compromiso de civilidad" entre la candidata y los candidatos a la Presidencia de la República se acordó que ninguno de ellos tomará la palabra en la ceremonia que se iniciará en punto de las seis de la tarde.
Se presume que lo anterior fue un resolutivo de última hora, toda vez que en el programa circulado anoche a los partidos políticos se estimaba la "intervención" de cada abanderado presidencial en un mensaje de tres minutos.
Extraoficialmente se adujo que se acordó que ninguno hablara porque "sería un riesgo" en la presente veda electoral de tres días, previo a la jornada comicial, en la que se prohíbe a candidatos y partidos participar en acciones proselitistas o de llamado al voto por alguna opción en particular.
En la ceremonia que se realizará en el auditorio del Instituto Federal Electoral (IFE), acudirán cinco personas en calidad de "testigos de honor", entre los que se encuentra Gerardo Gutiérrez Candiani, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El compromiso de civilidad entre los candidatos y los partidos que los postulan incluye un compromiso para aceptar los resultados que emita la autoridad electoral; evitar acciones de compra y coacción del voto y evitar manifestaciones violentas durante y después de la jornada comicial del 1 de julio.
Minutos después de las cinco de la tarde concluyó la sesión ordinaria del IFE; el presidente del Instituto, Leonardo Valdés, decretó un receso para acudir a la ceremonia con los candidatos y, a las siete de la noche, los integrantes del Consejo General del organismo regresarán al salón para dar inicio a una sesión extraordinaria.
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